Me encanta comprobar que en estos momentos de profunda y brutal crisis económica -y lo que nos espera por llegar- mi desGobierno hace buen uso del dinero de mis impuestos y del de millones de ciudadanos, y lo despilfarra emplea en necesidades imperiosas y en formativos programas de TV con altruistas y desinteresados intelectuales de reconocido prestigio.
Así da gusto pagar impuestos tan bien invertidos, aunque nos cueste tanto esfuerzo ganarlos.
Pues justamente estoy yo también escribiendo sobre mi dinero, porque los muy cabritos de Hacienda aún no me han devuelto las retenciones del IRPF de 2007, y me acabo de enterar de que no lo han hecho porque están pagando la compran de votos de Zapatero a 400 euros el voto.
¡Ladrones!